Soy el arlequín que se encarga de divertir
a la vida con sus infortunios, una máscara sonriente
que muere por dentro cada vez que se forma el
inevitable nudo en la garganta indicando la proximidad
de las lágrimas que sin embargo prefieren ser contenidas,
es mejor eso antes de dar rienda suelta al dolor que
intenta apoderarse de mi. Mirando hacia atrás, me doy
cuenta de que la historia se repite aunque los papeles
varíen, tal vez no he aprendido de mis errores, o, en
vez de volverme un poco más aguda con el paso del
tiempo mi instinto se va atrofiando progresivamente,
a veces me pregunto por qué, mas no encuentro aún
la respuesta, pero se que pronto llegará.
Soy la fabricante de recuerdos, de hermosos momentos
que dejan huellas que nos embriagan y arrastran a un
avasallante éxtasis espiritual, en mis creaciones dejo una
pequeña porción de mi alma, las memorias se transforman
en luces de bengala que arden con pasión por un breve
momento para deleitar al espectador, lástima que se
graben con tanta fuerza en mi memoria pero en las
mentes ajenas se borren lentamente hasta sólo volverse
fantasmas que tarde o temprano se sumirán en las
profundidades de un subconsciente atiborrado de nuevas
vivencias, y en cambio yo evocaré maquinalmente las
remembranzas de un pasado exquisito y soñaré con
acontecimientos ya sucedidos que harán doler levemente
las viejas cicatrices y terminarán abriendo nuevamente
las más recientes heridas.
Aún hoy, sigo confeccionando preciosos destellos para compartir,
porque así siento que debe ser, con el corazón puesto en
cada uno de ellos, con mi ser entonando la melodía de los
momentos que juntos nos dedicamos a crear, quédate un instante,
sólo un poco más, porque esto es lo único que puedo obtener y
dar, al final yo también me sumare a los fantasmas de tus
reminiscencias, mi sonrisa se irá perdiendo en el viento y mis
cabellos flotarán en un limbo de recuerdos muertos que yo seguiré
hasta el fin de mi existencia.
Pd: Este poema es vieeeeejo, tiene como dos años existiendo XD
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