miércoles, 8 de septiembre de 2010

Soy como esta estrofa de Astronaut

And I am still not getting what I want
I want to touch the back of your right arm
I wish you could remind me who I was
because every day I’m a little further off

Astronaut - "Who Killed Amanda Palmer" Video Series: Part 2

Adicciones

Una probada de amor sintético te vuelve adicto,
una de amor verdadero te puede matar. Pero
no es muerte física la que sufrirás, sino una peor,
más larga, trágica, detestable, absurda y ridícula.

El amor sintético es repetitivo, animal, instintivo,
un escudo para huir de los pensamientos que
suelen herirnos, tiende a silenciar el corazón inquieto,
calienta las manos y el cuerpo, trae consigo abrazos
fugaces, besos furtivos, miradas perversas y
caricias violentas. Es la colisión de dos cuerpos
intentando conocerse, consumirse, devorarse,
destrozarse y regenerarse en un círculo vicioso
explosivo, ardiente y pasional.

El amor verdadero es profundo y hermoso,
te deslumbra, al igual que el sol cuando te hiere los ojos
con su luz incandescente, es un eco retumbante
en los abismos de tu cabeza, una dulce obsesión
auto destructiva que te embriaga, vacío en las noches
cuando te rechazan, atardeceres nublados caminando
de la mano. Te entristece al ya no haber palabras
lindas que decir, te devora el corazón cuando sólo consigues
hielo entre las sábanas y al llegar a su fin te transforma en un
fantasma sin vida que se arrastra hacia la nada.